El Centro Europeo del Consumidor de Noruega está recibiendo muchas reclamaciones relacionadas con la empresa Norwegan Lab, principalmente consumidores de Bélgica y Alemania que se sienten engañados por esta empresa que vende pastillas de vitaminas.
El Centro Europeo del Consumidor en Noruega ha alertado de un aumento de las reclamaciones recibidas en relación con la empresa Norwegian Lab. A pesar de que los consumidores únicamente acceden a recibir una muestra gratuita de sus productos, acaban con una suscripción que en realidad no quieren. Se trata, por lo tanto, de una práctica engañosa (suscripción trampa o “subscription trap”) mediante la cual, a cambio de recibir una prueba de producto, el consumidor termina con una suscripción no deseada o no solicitada. En este sentido, hay que recordar que es ilegal dar de alta una suscripción si el consumidor no ha dado su consentimiento. Por lo tanto, la directora del Centro Europeo del Consumidor noruego - Linn Hogner Jahr- anima a todas las personas consumidoras que no hayan autorizado la suscripción a que envíen un correo electrónico o carta a Norwegian Lab indicando que no la quieren.
Puede ocurrir también que, al recibir los productos de Norwegian Lab, el consumidor reciba una factura de otra empresa. Esto ocurre porque Norwegian Lab suele ofrecer la posibilidad de pagar a través de la empresa Riverty para beneficiarse del servicio pospago. De esta forma, el consumidor abona el dinero después de recibir el producto y no antes. Pero si se decide no hacer frente a ese pago, es posible que la empresa vuelva a mandar otra factura con intereses. En este contexto, es importante saber que si el consumidor no ha solicitado voluntariamente la suscripción, no está obligado a devolver el producto recibido. Por lo tanto, si la empresa exigiera que se devuelvan las pastillas, deberá enviar un albarán de devolución y asumir los gastos de envío.
En enero, la Autoridad Noruega de Consumo envió una carta a la industria del sector que vende suplementos de salud y belleza por internet, en la que se facilitaba información y recomendaciones para el cumplimiento de la legislación relativa a los consumidores y la contratación de suscripciones. Del mismo modo, advirtió de las posibles medidas que podrían llevarse a cabo para supervisar e investigar las conductas del mercado, así como las posibles sanciones en caso de incumplimiento de las normas.
En caso de que los consumidores sospechen que han sido víctimas de una suscripción engañosa, el Centro Europeo del Consumidor recomienda lo siguiente:
Es importante tener en cuenta que, en realidad, el producto de prueba hay que pagarlo. Este es el precio a abonar cuando se solicita la muestra.